La enfermedad del hígado graso es una condición que padecen muchas personas de origen occidental sin siquiera saberlo.
Esta enfermedad es muy común entre quienes padecen diabetes de tipo 2, personas con obesidad o con problemas de alcoholismo.
Si no sabes lo que es, el hígado graso implica que las grasas neutrales se almacenen en la zona hepática.
Esto puede provocar una cantidad de enfermedades muy riesgosas ya que el hígado es un órgano que cumple una función vital para la supervivencia de los seres humanos ya que se encarga de sintetizar las proteínas y almacenar nutrientes.
Pero mantener sano tu hígado es tan simple como seguir una dieta adecuada.
Hoy te enseñaremos qué frutas debes consumir para evitar el hígado graso de manera natural.
Continúa leyendo para poder a implementar cuanto antes.
Frutas que sirven para prevenir el hígado graso
El hígado graso, también conocido como esteatosis hepática, provoca fatiga crónica, debilidad, malestar general y dolor en el abdomen.
Para evitar que esta enfermedad te ataque consume las frutas que te mencionaremos a continuación.
Tamarindo
Según estudios recientes, esta fruta tropical tiene muchos beneficios para la salud hepática.
En primer lugar, debido a que posee una gran cantidad de fibras solubles sirve para depurar y desintoxicar el organismo.
Además contiene ácidos insaturados que previenen la arterosclerosis, sirve para bajar de peso y elimina la retención de líquidos.
Asimismo, como es muy potente para combatir el colesterol malo (LDL) en sangre, ayuda a evitar el hígado graso.
Te recomendamos incorporar el tamarindo a tu dieta en forma de infusión.
Para ello, hierve 1 cucharada de hojas de tamarindo junto a un vaso de agua.
Espera a que se enfríe y bebe.
Fresas
Las fresas contienen una gran cantidad de fibras lo cual sirve para desintoxicar al organismo por medio de la evacuación.
Además contienen vitamina C que es muy efectiva para fortalecer el sistema inmunológico.
Por otra parte, su contenido de ácidos orgánicos permite deshinchar y combatir la acumulación de grasas en la zona del hígado. Asimismo, es excelente para regular la presión arterial y disminuir los niveles de colesterol malo en la sangre.
Puedes consumir las fresas tanto de forma natural como en jugos, batidos e infusiones.
Limón
El limón es un excelente depurativo natural que ayuda a combatir el ácido graso.
Lo único que debes hacer es consumir el jugo de un limón mezclado con un vaso de agua.
Bebe todas las mañanas en ayunas para alcalinizar tu cuerpo y evitar una gran cantidad de enfermedades, además del hígado graso. Su contenido de antioxidantes y vitamina C también es muy beneficioso para la salud.
El ácido del limón, contrariamente de lo que se cree, sirve para mejorar la digestión y proteger la salud hepática.
Pera
El fruto de la pera nos aporta una gran cantidad de nutrientes beneficiosos para nuestra salud.
Además, debido a que contiene una gran cantidad de agua, actúa como un depurativo natural.
Esto sirve para mejorar el funcionamiento del aparato digestivo, evitar el estreñimiento, perder peso y combatir la retención de líquidos.
La ingesta recomendada es de una pera por día para proteger la salud del hígado y del cuerpo en general.
Melón y papaya
Existe una mezcla mágica para combatir el hígado graso. Se trata de la combinación del melón y la papaya.
Solo debes mezclar ambos ingredientes, previamente pelados, en la licuadora. Mezcla hasta obtener una consistencia
homogénea y bebe todas las mañanas en el desayuno.
También puedes simplemente mascar las semillas de papaya para obtener todos sus beneficios.
Consumir estas frutas es muy saludable tanto para tu hígado como para todo tu organismo.
Comparte el secreto con tus seres queridos para que ellos también puedan beneficiarse.