Si no dormimos lo suficiente dificultamos la producción de leptina. Esta es la hormona que se encarga de mandar la señal de saciedad a nuestro cerebro.
Un truco muy efectivo para bajar de peso, es comer menos sin tener sensación de hambre o ansiedad.
Si tenemos hambre, tendremos la tendencia a comer demasiado e ingerir más calorías de la que nuestro cuerpo necesita.
Independientemente de los demás esfuerzos que hagamos, es vital que logremos controlar nuestro apetito. Debemos vencer la sensación de hambre y no caer en tentaciones.
Si nuestro cuerpo no está acostumbrado a una alimentación moderada, es probable que tengamos cierta dificultad para contener el hambre.
Por suerte, existen ciertos trucos de los que podemos echar mano, para que sea más fácil lograr nuestro cometido.
- Come despacio: La señal de saciedad que los nervios del estómago envían al cerebro, tardan de 10 a 15 minutos en llegar. Es por eso que es importante comer despacio, para dar tiempo a que llegue y no comer más de la cuenta.
- Aliméntate antes de sentir hambre: Si pasas demasiado tiempo sin comer, tu cuerpo sentirá una sensación de hambre incontrolable. Si por el contrario te pasas, el cuerpo generará más insulina de la cuenta, produciendo cansancio y además más hambre. ¿Qué puedes hacer? Para evitar sentir hambre, deben hacerse varias comidas al día. Las porciones deben ser reducidas, y la alimentación variada. Debemos elegir alimentos ricos en vitaminas y fibra, para fomentar el funcionamiento de nuestro metabolismo.
- Dormir bien: Debemos respetar nuestras necesidades de sueño, y organizar bien nuestro tiempo, para que podamos dormir de 7 a 8 horas diarias.
Aunque no lo sepas, existe una relación directa entre las horas de sueño, y la capacidad para contener el hambre. La falta de descanso puede aumentar el deseo de comer dulces, grasas y carbohidratos. ¿Qué puedes hacer? Organizar bien tu tiempo, para lograr dormir un mínimo de 8 horas al día.
- Consumir suficiente agua: Más de la mitad de la población sufre deshidratación. Debemos tratar de consumir 8 vasos de agua al día, además de aprovechar el agua que contiene frutas y verduras.
- Vigilar las calorías líquidas: El organismo digiere más rápido líquidos que sólidos. Cuándo se ingieren calorías líquidas, sube el azúcar de la sangre, lo que provoca más sensación de hambre. Algunas personas piensan que pueden eliminar esos líquidos fácilmente, pero no es tan sencillo. Lo cierto es que su alto contenido en azúcar puede alterar el metabolismo. ¿Qué puedes hacer? Evitar refrescos y bebidas azucaradas. Consume más agua, té y zumos naturales.
Si sigues estos sencillos consejos, podrás bajar de peso controlando tu apetito. Recuerda que el ejercicio físico regular y moderado será un gran aliado para mantenernos en forma. Elige bien los alimentos que consumes y ¡A triunfar!